Un grupo de 31 niños volvió a Ucrania después de haber sido deportados a Rusia por parte del Ejército ruso desde territorios ocupados, informó la organización Save Ukraine, que denuncia que los menores ucranianos fueron trasladados al país vecino de manera ilegal desde el inicio de la guerra.
«Hoy nos encontramos en casa con otros 31 niños ucranianos, deportados ilegalmente por los rusos de los territorios ocupados. Esta fue la más difícil de todas las misiones de rescate anteriores», aseguró dicha organización en redes sociales.
De acuerdo con la asociación, desde el 24 de febrero de 2022 recuperaron a 61 niños «deportados por la fuerza» a Rusia y a 120 desde los territorios ocupados de Ucrania.
Los niños que regresaron el viernes vivían en las regiones de Jarkov (noreste) y Jerson (sur), que fueron ocupadas por el Ejército ruso hace un año y liberadas por las fuerzas ucranianas el otoño (boreal) pasado, indicó la organización, añadiendo que los menores cruzaron la frontera a pie y luego tomaron un ómnibus para continuar con su viaje.
Mykola Kuleba, al frente de Save Ukraine, elogió a las «madres heroicas» que viajaron a territorios rusos, o controlados por los rusos, para recuperar a sus hijos y relató que durante ese viaje una mujer que quería recuperar a dos de sus nietos murió a causa del «estrés».
Las madres ucranianas fueron «interrogadas durante 13 horas» por agentes de los servicios secretos rusos, añadió el responsable de la asociación.
El gobierno de Ucrania asegura que más de 16.000 niños fueron deportados a Rusia desde que empezó la invasión rusa. Moscú, en tanto, niega estas acusaciones y asegura que trasladaron a los niños a territorios rusos para que estuvieran a salvo de los horrores de la guerra.
