El presidente Emmanuel Macron pidió que las escuelas que sostengan esta semana una «hora de discusión» sobre el racismo y el antisemitismo, después de que la violación de una niña judía en un suburbio de París se sumara al cargado clima social de Francia antes de las elecciones.
Tres adolescentes fueron detenidos esta semana tras la denuncia de una niña de 12 años de Courbevoie, al oeste de París, quien denunció a la Policía que había sido violada en grupo mientras la ofendían con insultos antisemitas, informó la fiscalía de Nanterre. La investigación se centra en los cargos de violación, amenazas de muerte y agresión, entre otros delitos, con una supuesta motivación religiosa citada como agravante.
Los incidentes de antisemitismo aumentaron en Francia desde el ataque de hombres armados de Hamás contra el sur de Israel el 7 de octubre y la posterior guerra contra el grupo islamista lanzada por Israel.
Macron no tardó en reaccionar, con Francia en medio de una campaña electoral de tres semanas tras haber convocado unas elecciones parlamentarias anticipadas.
El Presidente pidió este miércoles a la ministra de Educación, Nicole Belloubet, «que organice un debate en todas las escuelas sobre la lucha contra el antisemitismo y el racismo, para evitar que el discurso del odio con graves consecuencias se infiltre en las escuelas», informó la oficina de Macron.
Los opositores acusaron a la Agrupación Nacional y al partido de extrema izquierda Francia Insumisa, dentro de la alianza Frente Popular, de tolerar opiniones antisemitas en sus filas, acusaciones que ambos partidos niegan.
El líder de la Agrupación Nacional, Jordan Bardella, llamó a Francia debe luchar contra una «atmósfera antisemita» presente en el país desde el comienzo de la guerra de Gaza.